Historia

Está aquí: 

Origen del Nombre de Loma de Cabrera

Debe su nombre al prócer restaurador José Cabrera (1810-1884) hombre de connotada presencia, decidido y valiente alzado en las lomas de esta comarca, desde donde participaba en sus actividades guerrilleras en época de la Restauración de la República Dominicana (1861-1865).

Fue por donde transitaron los patriotas desde el poblado de Sabaneta hasta Haití, rompiendo en sus briosos corceles los estrechos desfiladeros de esta hermosa campiña y cuenta la leyenda, que la madre del General José Cabrera, cuando escribía a su hijo, ponía en la dedicatoria «A mi hijo José Cabrera que está detrás de la Loma», es de ahí de donde surge el nombre de la Loma de Cabrera, cuando éste se ocultó con los suyos en esta región, y avanzando un poco las páginas de la Historia, veamos por qué tuvo que recurrir a esta acción: Varios de los insurgentes del estallido de febrero en la guerra Restauradora en 1861 se mantuvieron deambulando por el bosque, siendo una parte de ellos comandados por el General José Cabrera, quien organizó un destacamento guerrillero en la Loma de David, otros se refugiaron en Haití.

Por todo lo expuesto se le consideró el Gral. José Cabrera digno y merecedor de dejar plasmado su nombre en esta apartada zona y aunque desde el año 1863 se le llamaba la Loma de Cabrera a esta área boscosa que era un paraje de la sección Restauración, perteneciente a la común Dajabón que a su vez era dependencia de la Provincia de Montecristi no es sino hasta el 23 de junio de 1892, mediante el Decreto No. 3192 que es erigida sección perteneciente al recién creado Puesto Cantonal «Restauración» que mediante el mismo Decreto es elevada de sección a Puesto Cantonal con secciones pertenecientes a la común Dajabón. Dicho Puesto Cantonal perteneció a la Provincia Montecristi.

Loma de Cabrera elevada a Común el 20 de julio de 1938, mediante la ley 1521, categoría de Común efectiva a partir del 1º de enero de 1939, durante el gobierno de Trujillo. Al cambiar su estatus para ya depender de la recién creada Provincia Dajabón, con asiento de su gobierno la nueva Común Loma de Cabrera en «Villa de Loma de Cabrera»

Para el momento de ser levantada esta común, su gobierno comunal queda constituido de la manera siguiente: El señor José A. Peralta ejerciendo la función de síndico; Félix Peralta, tesorero; y Eligio Rodríguez, secretario, siendo asistido este gobierno por 14 alcaldes pedáneos que comandaban en las 14 secciones en que quedó constituida la Común y en los 63 parajes contaban con segundos alcaldes.

En el momento de su levantamiento esta Común cuenta con una población de 12,575 habitantes.

 

Evolución Histórica de Loma de Cabrera.

El territorio de 341.03 Km2. (incluyendo el Distrito Municipal de El Pino) que hoy pertenece al municipio de Loma de Cabrera, en época muy remota, antes de la invasión europea, perteneció al Nitaíno Higuanuco que era una dependencia del cacicazgo Marién que era uno de los cinco cacicazgos en que estaba dividida la isla de Santo Domingo, en época de los indígenas, gobernado a la llegada de Colón por el cacique Guacanagarix. Claro está que aún no se llamaba Loma de Cabrera. Este territorio era llamado «Haití» por los indígenas que significa «Tierra Alta».

Fueron sus primeros pobladores los indígenas provenientes del miltiplicamiento de un gran número de familias que en tiempos remotos estuvieron que emigrar por la costa de la Florida, ahuyentados por las invasiones de los apalaquinos, túcalos y demás tribus guerrera y turbulentas en que abundaba el Continente del Norte.

Los indios, llamados así por error, cuando habitaron ésta región de Loma de Cabrera lo hicieron a orilla del Río Massacre al que llamaban Guatapaná posiblemente en área del Castellar puesto que es el único lugar donde han aparecido vestigios de esa raza, como lo fueron restos de vasijas de arcillas y caritas de indios, encontradas en gran cantidad por el Señor Juan de la Cruz Álvarez (Puchú), en su propiedad, las que fueron donadas por él al Museo del Hombre Dominicano.

Esos primeros pobladores de Loma de Cabrera, hasta el año 1492 había llevado una vida tranquila, con una organización social donde no había división de clases, sólo una jerarquización y las familias formaban clanes y los clanes formaban tribus, las tribus formaban taínos y los taínos formaban cacicazgos y cinco cacicazgos formaban la división territorial de la isla llamada Quisqueya o Haití por sus primeros pobladores.

En la época colonial, el nombre del taíno Higuanuco nombre David, ostentó el nombre de Loma de David como extensión del pobladito rural llamada «David» Este nombre era posiblemente el de algún connotado español de la época.

Cuando era Loma de David, no era más que un espeso bosque donde se albergaban todo tipo de aves, reses y puercos salvajes y otros mamíferos de nuestra fauna, no era más que el paso obligado a través de unos estrechos trillos para llegar, uno desde David a Sabaneta y otros de Dajabón a Gurabo; no era más que un rebujo de chozas encanijadas como si quisieran gritar un pasado ya muerto del que sólo quedan ruinas y cenizas, donde sus seres primitivos, los indios, dueños y señores de ésta comarca, fueron exterminados sustituidos por una mezcolanzas de razas, costumbres y credos; unas nuevas razas llamadas zambos, mulatos y mestizos; donde no quedan ningún rasgo fisonómico de aquella bella raza que reflejaba en su fisonomía la inocencia y candidez, propia de aquellos hombre y mujeres, sus bellos ojos rasgados, su lacia y negra cabellera, destacándose sobre su bronceada piel color canela, que su único delito fue ser buena anfitriona para aquellos invasores, malhechores, ambiciosos, salteadores y ladrones sin alma llamados españoles.

Al ser sustituida la raza extinta de éste territorio, también desaparece con ella la espesa vegetación, gran parte de la flora y la fauna primitiva, los trillos tan dando paso a caminos más anchos llamados callejones, por donde cabalgan los jinetes de la muerte, estos callejones a su vez se convierten luego en caminos vecinales. El nombre del taíno Higuanuco ha sido sustituido por David y éste nombre queda luego opacado frente a los nuevos amos del territorio y se hace necesario cambiarlo por el nombre de otro que encajara con la fisonomía de época más reciente, y que tendría alguna relevancia o mejor posición dentro de los suyos.

Todo vestigio indiano queda yerto, enterrado entre las páginas de la Historia Patria: «Capotillo» no sabemos desde cuándo, sólo se sabe que para el año 1730 aparece en la historia con éste nombre en honor a Vicente Capotillo, de nacionalidad española, enviado por España con el grado de encomendado, ya que en ese lugar había algunos españoles y éste viene a velar por los suyos ese nombre de Capotillo quedó sólo para señalar la parte Suroeste de lo que era David, puesto que la parte Sureste de lo que era la Loma de David en el año 1863 comienza a llamarse la «Loma de Cabrera»